martes, 13 de noviembre de 2012

Mañana, yo voy a la huelga.

Hoy, mi tía, una señora de 67 años ha llegado a mi casa muy exultante. Llevaba en la mano derecha un montón de hojas blancas un poco arrugadas. Al llegar a mi habitación, las ha soltado en mi escritorio y se ha puesto a cantar y bailar agarrada a su muleta. Tras el momento de shock me he dado cuenta de que los papeles eran panfletos que estaban repartiendo en la plaza de mi pueblo y rezaban tal que así: 

Te prometieron UN TRABAJO 
o conservar el que tenías. 
¿Les votaste?
Un año después, sigues sin encontrar 
empleo, lo has perdido (o lo perderás)
EL PRÓXIMO 14-N
¿aún seguirás callado esperando un 
milagro de quienes te engañaron?
PARTICIPA: Concentración el miércoles 14, 
en la Plaza de España de Daimiel, a las 12 h.
(En Ciudad Real, a las 19h, estación de Autobuses)
¡¡POR TUS DERECHOS!! 
* (Si no te permiten hacer huelga en 
tu empresa, o si no trabajas, también
puedes hacer huelga de consumo
no compres, no repostes, no consumas...)


Cuando ha visto que terminaba de leer, me ha mirado con una sonrisa en la cara y me ha dicho "¡¡¡Por fin Daimiel se levanta contra las injusticias!!!". Me ha dejado los panfletos, para que los guardara de recuerdo, se ha llevado ella uno para colgarlo en su casa, y me ha prometido que mañana a las 12:00 será la primera en estar frente al ayuntamiento de mi pueblo, con su muleta y su pierna coja y me ha hecho prometerle que yo la representaré allí en Ciudad Real, ya que ella no podrá ir. 

Algunos os preguntaréis por qué os cuento esto... Os lo cuento para que veáis como las manifestaciones no sólo son cosa de agresivos y locos que se dedican a dar hostias; para que veáis que una señora de 67 años, jubilada y con nietos también es capaz de salir a la calle para defender, no lo que le están quitando a ella, sino lo que nos están quitando a todos; para que veáis que aunque una persona tenga la nevera llena, el banco con dinero y calefacción este invierno, también puede (y debería...) salir a la calle. Por SOLIDARIDAD. Porque no todos están igual. Porque hoy puede ser un desconocido, pero mañana puede ser tu primo o tu hermana la que esté en la calle. 

Pensadlo un momento. Quizá mi tía no sea siempre el mejor ejemplo a seguir, pero QUIZÁ en este aspecto, muchos tendríamos que tomar algo de ejemplo. 


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